28 julio, 2011

¿Cómo evitar la pérdida de cabello?


La caída del cabello es uno de los padecimientos más comunes de nuestros días. Afecta a personas de cualquier raza, sexo y edad. Si bien es cierto que en distinta medida según se reúnan una serie de parámetros o no.
Sus causas son muy variadas, desde el estrés hasta la genética pasando por problemas de la piel u otro tipo de enfermedades de fondo, como el hipotiroidismo o la diabetes.
Sin embargo, es necesario precisar que el verdadero problema no reside en que el pelo se caiga, ya que esto le sucede a todo el mundo, sino en que lo haga excesivamente y, sobre todo, en que no se desarrolle otro para reemplazarlo.  Por tanto, deberíamos hablar más bien de que el cabello no crece como auténtico padecimiento.
Los motivos por los que perdemos pelo pueden ser -como decíamos- genéticos, es decir, hereditarios y, en este caso, su solución es más compleja. No obstante, sus causas pueden ser otras y tener más fácil remedio.

Así, pueden deberse a un problema dermatológico, como, por ejemplo, el exceso de grasa en la piel de la cabeza. En este caso, una visita al médico puede parar nuestra pérdida de cabello mediante un tratamiento.
También puede ser causada por el estrés, algo muy frecuente hoy en día. La sociedad moderna exige que vivamos muy aprisa y ello nos genera esa mezcla de aceleración y ansiedad que se ha bautizado así y que es perjudicial, no sólo para el cabello, sino también para el corazón y para nuestra salud en general. En este último caso, bastará con eliminar ese estrés para que cese la pérdida de pelo.
Pero, además, para prevenir la caída del cabello, podemos seguir una serie de pautas en nuestra vida diaria que nos ayudarán a conservarlo.
En primer lugar, es falso el tópico de que el pelo se cae por lavarlo mucho. Al contrario, lo que sí que origina caída del cabello es la falta de higiene. Por tanto, es recomendable lavarse la cabeza con frecuencia, aunque, eso sí, conun champú neutro y frotándola con las yemas de los dedos suavemente, nunca con las uñas y con fuerza.
También es conveniente que, al hacerlo, utilicemos agua tibia o fría mejor que caliente, ya que ésta última hace sufrir más al cabello. Y, a la hora de secarlo, debe hacerse con igual suavidad.
Además, es recomendable peinarse con el pelo húmedo y utilizar lo menos posible secadores y otro tipo de aparatos. Igualmente, existen determinadas vitaminas que ayudan a conservar el cabello. Pero, en este caso, lo mejor es que sean recetadas por un especialista.

No hay comentarios: